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Mostrando entradas de octubre 3, 2013

HAY GATAS...

CUANDO LAS GATAS NO SE LLAMAN MILEVA... NI  SON ROJAS NI NEGRAS...  ¡ Hay gata! te contesto... pero lo hago un poco más a lo bruto, y como dicen en mi tierra extremeña, en mi comarca de Barros... Parafraseas a este hombre, tan sabio y a la vez tan necio, a Albert Einstein, y para que veas como se escribe la historia,  te copio, y muestra un botón. No es otra cosa  que el tratado que hizo jurar y firmar a su prometida, la pobre ilusa enamorada de una in-persona, ella la futura promesa de la ciencia se quedo en la esposa quebrada a la pata de la cama de un científico de gloria androcéntrica y machista, porque ella,  Mileva olvidó Ser, a su ser en esa persona  innata, que no es de nadie, sino de una misma... Dolo supo acomodar-se a un ser ingrato con ella, a su ciencia, a su género los puso a los pies del felpudo del macho, y el persona ingrata con el género que le dio la vida, solo hizo lo que tantos hicieron a lo largo de la historia.  La Verdad es que, Mileva, no fue una

AQUEL SUSPIRO... poesía de las mil y una noches

AQUEL SUSPIRO Cerré dentro de tus comisuras le dejé fértil en la ansía que te nombra ¡Sin nombrarte...! cerré el mundo que dicen que sabe de todo, lo acerqué hasta aquella mi montera y lo puse en la picota donde busca mi sombra. ¡Ay! Cerré aquel suspiro que te nombra, sin sacar mi lengua de tu boca, cerrando a la mía dentro solo tú lengua... ¿Que saben las chisteras del saber de tu boca? ¡Ay! Necesidad, de necesidades, penurias y miseria fuera de ti todas. Ser que no ser, tener que no se tiene, disfrute que no se goza cuando  de ti ando lejos y loca. ¡Ay! de mí en ese suspiro, que se cierra en el palco celestial, aquel que nadie sabe y solo mi boca y lengua sabe  y te nombra Cerré aquel suspiro 3.10.2013 Carmen Hernández Rey ©autora extremeña todos los derechos de autora (dar) foto subida del muro de José Luis Negrón Ríos. Carmen Facebook er

REZO VERSOS... poesía de la mil noches

REZO VERSOS Y aquilato tu mano en aquella esquina de los desconciertos sin memorias, completada y consumada rezo el mejor de los versos, piel en mano, boca y manos buscando lunas Te rezo versos desobedecidos e insolentes, versos de asaltos inesperados y rezo en los almacenes de las ateas sábanas donde te exclamo y clamo a tu vía, sin cruz. ¡Manjar divino! Juramento, por el cual me hago perjura y profanadora inmisericorde, a todo tu cuerpo deletreo sin oxígeno ni tiempo... Milímetro a milímetro cuento tus pestañas y recorro tus iris, de tus campos bebo sus arcos, y sé que no habrá piedad que pare a tus manos dentro, adentro de mis territorios más profanos, rezo en la búsqueda perfecta del castigo escondido, en este verso te rezo, entre la in distancia de tu cuerpo al mío. Te rezo versos sin miedos sin simienzas sin agostos Tan solo... amor, te rezo versos, por las callejuelas de tu cuerpo, y a propósito digo, hago, pienso y quiero... perderme ¡Perder a mi cuerpo, en los recovecos