EN LAS PEPITAS DE MANZANAS
Te quiero...
de la manzana,
en cada flor,
que adorna a las ramas,
que la sostienen en el aire
y las hace madurar,
fuertes, en sus péndulos,
sujetas,
en cada unión de la luna,
porque ellas se velan
de luz y alba...
Te amo como el manzano ama
a la primavera,
desde el inicio,
en la frondosa tierra,
en la de verde y dúctil
corteza,
floreciendo al exacto ser,
nuevo fruto,
deseado aroma en la flor,
blanca y rosácea, te amo...
cual ser nacido de su nuclear
belleza.
Tal cual, eres en las primaveras
explosivas, de tu universo, así
te deseo... sol, luna,
agua y tierra,
Sol que desea en las
atalayas sensuales
¡Alto y libre!
orbitando en el cosmos,
sin saberse, espectral y orbitándose
luz y calor ¡Estrella!
Te quiero en cada pepita
de la manzana,
en ese núcleo marginal
y tierno donde tu magnético
me encela,
voy como arco de perihelio,
vomitadora de afelio soy,
y es que te amo...
en cada pepita de
de manzana,
en la rama en flor,
en la raíz que me besa,
abrasa y quema
cual néctar de
pepitas de manzanas.
13.10.2013
Carmen Hernández Rey
© autora extremeña
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