MIRE USTED… SEÑOR JUEZ II
Sí, mire bien que mañana
¡Quizás! Usted más
no me vea.
Mire despacio a esta mujer,
que nada le dice
y nada le importa,
-lo sé señor juez-
Porque, será la misma que mañana
al quedarse embarazada
elija, cuando y como ser madre
y, tal vez elija el
camino de en medio
señor juez.
Sí cogeré otro vía cualquiera,
señor juez
porque usted, ha dinamitado
con sus bombas de rancia moral,
mi trayectorias,
puso en mi itinerarios
con su bajo
raciocinio,
granadas de racimos,
en mis horizontes más legítimos
señor juez.
Y ¿Sabe usted cuales,
son señor juez…?
¡No, claro…! ¿Cómo iba usted
a saberlo?
Usted nunca parirá, se
quedará preñado sin quererlo
o queriendo,
le violarán
le exigirán
que tenga un feto
con muerte en el cerebro
su vida nunca peligrará,
cuando sea un embarazo
de alto riesgo.
¡Ya sabes usted! Señor juez
Usted no se quedará embarazado,
tampoco los obispos,
ni prelados purpúreos
y, ni tan siquiera los pontífices…
Porque de haberse quedado
Tan solo una vez un hombre
los abortos serían “Sagrados”
Y otra cosita, señor juez…
Esto es un lema del día ocho de marzo
día de la mujer,
coreado por miles de mujeres
por las calles de Madrid
hace más de diez años
¡Ah, vale!
¿Qué no sabe
que tenemos un día
de la mujer?
Claro, cómo saberlo,
“Señor justiciero”
Y es que usted, señor juez,
no nació del útero de una pobre
mujer, de una mujer pobre,
señor juez…
Su “madre” no era de casta humilde,
Ni tampoco de mujer la venden
al mejor precio, o postor
Si, ya sé que usted
nació de una
mujer fina y fiel cumplidora
de su calaña y estirpe, de boatos
culinarios…
¡En fin..! De altas cunas
De aquellos señores de grandes
casas y damas,
Y, “amigas” por
doquier
¡Ay! Señor juez recordando
esto me viene a la memoria
el nombre de una ¡Gran mujer!
feminista y cantante, era Cecilia
y su canción decía así…
“Dama dama de alta cuna
De baja cama, señora de su señor,
Amante de un vividor.
Dama que hace
lo que le viene en gana”
de mujeres,
finas y damas como la suya
señor juez,
pero…
¡Perdone señor juez!
Si esta tarde le di un mal rato…
Yo, quizás pronto, ya ni cuente
en las listas del paro…
Ese que su partido tiene
Bien equipado
¿Sabe por qué…?
Porque, mi aborto, señor juez
sí que es mío y sagrado
Así que…
Quédese usted, con sus leyes de:
jueces pudientes y
y mal olientes
pendejos ,
de crucifijos y curias
pederastas
asalta mujeres indefensas.
Y
Mujeres… ¡Atentas!
Nosotras, siempre tendremos
las agujas de nuestras calcetas,
los buenos árboles para lanzarnos,
buenas raíces y especias
las buenas hierbas…
la Sabina maestra
¡OH! Mira…
¡Que pena que pena
Señor juez!
Que usted valga tan poco
en la jurisprudencia,
sea tan servil a sus amos
de bancas y sobre
con apuntes en libretas
que valga menos,
sí que usted, valga menos
que una blástula,
y que tenga el cerebro
de una mórula
¡Que pena señor juez!
Que siendo nacido
valga menos que un cigoto
de gaviota o cigüeña
25.4.2013
Carmen Hernández Rey
Autora extremeña
© todos los derechos
de autora sobre el texto
Foto de Google
http://www.google.es/url?sa=t&rct=j&q=&esrc=s&frm=1&source=web&cd=6&cad=rja&ved=0CFwQtwIwBQ&url=http%3A%2F%2Fwww.youtube.com%2Fwatch%3Fv%3DNa93U6cMt4o&ei=hKJ6UbKvK_Sv7AbS3oGIDg&usg=AFQjCNGQgjcZEOWHn7vrNounwbj2ERRYaA&sig2=qXBZu2Kb74LRLJL9MtNhkg&bvm=bv.45645796,d.d2khttps://www.facebook.com/carmen.hernandezrey?ref=tn_tnmn#!/photo.php?fbid=10200917840298521&set=a.2381288541885.2136625.1540835521&type=1&theater
Comentarios
Publicar un comentario